Regresando de un sueño

Hola amigos. Hace siglos que no escribo nada en mi blog, pero es que he estado muy ocupada. Estuve de vacaciones por Alemania y Francia durante los días del 7 al 26 de agosto. En esos días me pasaron cosas inolvidables, fue un viaje de vacaciones casi perfecto, tanto que hasta sueño con estar allá nuevamente.

No quiero escribir mucho porque ya hasta me es pesado escribir por aquí, pero seré breve contando mis experiencias.

En Alemania, estuve en las ciudades de Essen, Colonia, Bonn y Frankfurt. Essen es una ciudad muy rica, especialmente porque posee varias minas de carbón, tiene pocos habitantes y es bien grande. Es la ciudad perfecta para vivir, todo es tranquilo, las personas son amables, las casas son muy hermosas (hasta en los barrios pobres), sólo vi un pleito y un mendigo durante el tiempo que estuve ahí. De las ciudades que visité fue la que más me gustó.

En Colonia pasamos la segunda semana. Colonia tiene la Catedral más hermosa que existe, también se puede apreciar la belleza del río Rhein. En esta ciudad vi a Benedicto XVI cuando arrivó a Alemania y fuimos al Marienfeld a la vigilia (donde, por supuesto, yo me dormí). Cuando estuve en Colonia, aproveché y fui un día a Bonn (la ciudad de Beethoven y antigua capital de una parte de Alemania), donde lo único que hay que buscar es la plaza de Beethoven, hehehehe, al menos eso fue lo único que yo vi en lo que estuve ahí. A Frankfurt fui el día antes de regresar a Santo Domingo, pero no pude ver mucho, porque tenía que llegar al Aeropuerto.

Luego de Colonia, fuimos a París. Esta es una ciudad muy impresionante y de mucho glamour, donde la gente no tiene tiempo de saludar ni de ayudar a un turista perdido. Fuimos a ver los monumentos más famosos (Torre Eiffel, Arco del Triunfo, Campos Eliseos, Museo del Louvre, Palacio de Versalles, Notre Dame, entre otros). Cenamos en un restaurant frente a la torre, lo cual es muy romántico, paseamos por el Senna y por el Campo del Amor. En París todo es muy caro, así que les recomiendo que si van de visita, lleven muchos euros.

Lamentablemente todo lo que empieza termina y el viernes 26 tuve que regresar a mi país, llegué super agotada, pero me fui a juntar con los panas para despedir a Nika. Eso sí, que el sábado sólo estuve despierta por tres horas, así que calculen las horas de sueño. Aún estoy recuperando fuerzas de mi viaje. Lo que les puedo decir es que cada centavo valió la pena.